El magnesio es un mineral esencial para la salud humana, y se ha ganado el título de "mineral antiestrés" por su capacidad para equilibrar el sistema nervioso central. Está involucrado en la regulación de la función normal del sistema nervioso central (SNC), estimulando las membranas neuronales, como las de las células cerebrales. Un suministro adecuado de magnesio tiene un efecto positivo sobre la ansiedad, el estrés y el nerviosismo. Sin embargo, el estrés crónico puede reducir los niveles de magnesio en el cuerpo.
Esto puede ser causado por una patología, como inflamaciones intestinales crónicas, celiaquía, diabetes, enfermedades de la tiroides o de los riñones y cardiopatías. El magnesio ayuda a amortiguar el exceso de calcio y lo mantiene en niveles normales, limitando la respuesta de estrés. Además, el magnesio es importante para muchos procesos que realiza el cuerpo, como regular la función muscular y del sistema nervioso, los niveles de azúcar en la sangre y la presión sanguínea. También ayuda a formar proteína, masa ósea y ADN.
Estas funciones positivas hacen que muchos nutricionistas recomienden su consumo para mantener una estabilidad emocional. El magnesio también colabora con mecanismos que nos llevan a la relajación, reduciendo la ansiedad y manteniendo el cerebro sano. Investigaciones científicas recientes han encontrado que suele faltar en la dieta de la mayoría de las personas. Por lo tanto, es importante consumir alimentos ricos en magnesio para obtener los beneficios que ofrece este mineral para el sistema nervioso.
Además, los resultados de algunas investigaciones apuntan a los posibles beneficios del magnesio en el alivio de los síntomas de la migraña y en la regulación de los niveles de glucosa en sangre. El magnesio también ayuda al cuerpo a procesar el azúcar y tal vez ayude a reducir el riesgo de resistencia a la insulina (un trastorno que lleva a la diabetes). En conclusión, el magnesio es un mineral indispensable para mantener un buen funcionamiento del sistema nervioso. Su deficiencia puede causar entumecimiento, hormigueo, calambres musculares, convulsiones, cambios de personalidad y anomalías en el ritmo cardíaco.
Por lo tanto, es importante consumir alimentos ricos en magnesio para obtener todos sus beneficios.