Investigaciones recientes han demostrado que el magnesio puede tener un papel importante en la prevención y el tratamiento de enfermedades como la hipertensión, las enfermedades cardíacas y la diabetes. Sin embargo, actualmente no se recomienda tomar suplementos de magnesio. Las dietas ricas en proteínas, calcio o vitamina D aumentarán la necesidad de magnesio. El citrato de magnesio se usa para tratar el estreñimiento a corto plazo.
El citrato de magnesio pertenece a una clase de medicamentos conocidos como laxantes salinos. Funciona al retener el agua con las heces, lo que aumenta el número de deposiciones y suaviza las heces para que sean más fáciles de expulsar. Una de las mejores formas de tomar este mineral es en polvo, es decir, en forma de citrato de magnesio. Sin embargo, si es necesario, siempre se puede recurrir a la suplementación, aunque esto lo determinará un médico en todos los casos.
Si bien es posible que no obtengas suficiente magnesio de tu dieta, es poco común que presentes una verdadera deficiencia de este mineral. Si deseas leer más artículos relacionados con Cómo Tomar Magnesio, te recomendamos que visites nuestra categoría de Medicinas y Suplementos. En cuanto al citrato de magnesio, se trata de una fórmula eficaz compuesta por magnesio y ácido cítrico. Como ya hemos mencionado, tu necesidad de magnesio puede ser diferente a la de tu pareja o hermanos. Por lo tanto, parece poco probable que necesitemos generalizar los suplementos de magnesio en la población sana cuando sus requerimientos se cubren bien con la dieta.
Las dosis altas de magnesio provenientes de suplementos o medicamentos pueden causar náuseas, calambres abdominales y diarrea. Si has hecho un análisis y te ha salido ligeramente bajo el magnesio o si no estás llevando una dieta especialmente sana y equilibrada, hay alimentos que pueden ser interesantes para incorporar a tu dieta. Según la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, los hombres mayores de 18 años necesitan 350 mg al día de magnesio y las mujeres 300 mg sin variaciones durante el embarazo o la lactancia. Es importante mantener todos los medicamentos fuera del alcance y la vista de los niños pequeños ya que muchos envases (como los pastilleros semanales y aquellos que contienen gotas oftálmicas, cremas, parches e inhaladores) no son a prueba de niños pequeños que podrían abrirlos fácilmente. Cuando existe un pequeño déficit, el cuerpo nos alerta con síntomas muy leves que podríamos no asociar con este mineral. Aunque no es común contar con un déficit de magnesio ya que el cuerpo también produce este mineral y lo ingerimos en la dieta, aquellas personas que presenten este déficit podrían sentir debilidad muscular, somnolencia, apatía, irritabilidad, problemas para conciliar el sueño, problemas de memoria o problemas cardíacos. Por lo tanto, la falta de magnesio, inicialmente casi imperceptible, puede perjudicar tu salud sin que te des cuenta.
Al tomar magnesio se recomienda dividir las dosis en dos al día para mejorar la absorción a menos que el médico indique lo contrario. Si se incrementan las cantidades sin contar con la opinión profesional esto podría tener efectos nocivos en nuestro cuerpo.
